Después del colapso de su práctica de terapia de grupo anterior, Richard ya no puede realizar las sesiones tradicionales de 50 minutos que la mayoría de los terapeutas tienen con sus pacientes. En cambio, ha desarrollado una nueva forma de terapia: sesiones semanales de fuego rápido con sus pacientes que se realizan en línea, a través de una cámara web. Los pocos pacientes en su lista presentan un hilarante e indignante catálogo de neurosis, fobias, problemas, ansiedades y psicopatías, pero incluso estas sesiones cortas, donde se enfrenta a todo desde lo sublime hasta lo ridículo, no son su mayor desafío. Su paciencia y su temperamento se estiran hasta su límite por las interrupciones diarias de una familia extensa exigente, adolescentes errantes y su propio pasado lleno de problemas.......
Después del colapso de su práctica de terapia de grupo anterior, Richard ya no puede realizar las sesiones tradicionales de 50 minutos que la mayoría de los terapeutas tienen con sus pacientes. En cambio, ha desarrollado una nueva form...
Después del colapso de su práctica de terapia de grupo anterior, Richard ya no puede realizar las sesiones tradicionales de 50 minutos que la mayoría de los terapeutas tienen con sus pacientes. En cambio, ha desarrollado una nueva forma de terapia: sesiones semanales de fuego rápido con sus pacientes que se realizan en línea, a través de una cámara web. Los pocos pacientes en su lista presentan un hilarante e indignante catálogo de neurosis, fobias, problemas, ansiedades y psicopatías, pero incluso estas sesiones cortas, donde se enfrenta a todo desde lo sublime hasta lo ridículo, no son su mayor desafío. Su paciencia y su temperamento se estiran hasta su límite por las interrupciones diarias de una familia extensa exigente, adolescentes errantes y su propio pasado lleno de problemas.......